
La Iglesia católica a través de los años y sobre todo en la actualidad se ha visto envuelta en los penosos escándalos asociados a párrocos pedófilos en distintos lugares del mundo. Las victimas claman justicia y una verdadera reparación. Sin embargo las políticas impulsadas por el Papa Benedicto XVI solo protegen y ocultan a los responsables y en la mayoría de las veces escapan de la justicia amparados por esta institución de la moral y del decoro. En Chile también han salido a la luz pública casos de curas pedófilos. Sin embargo son lamentables las declaraciones del Cardenal Francisco Javier Errázuriz diciendo que “gracias” a Dios las acusaciones de pedofilia en Chile han sido pocas, han levantado polvo por la incoherencia del discurso que esta institución profesa y es una falta de respeto a las victimas y ciudadanía tales declaraciones.
“No abusaras de la pureza de la infancia” es una reflexión en torno a esa supuesta moral y rectitud amparada en la iglesia católica a través de quienes deberían ser guías espirituales de las personas que profesan el catolicismo. Sin embargo muchos de ellos cometen crímenes repudiables como son los abusos sexuales a niños, quedando en la más plena impunidad.
Me visto de cura y manipulo muñeco/as, escribo palabras y abuso de la infancia reflejada en estos juguetes, formando una cruz.